Mi experiencia musical en Roma. 2023

Cuando fui a Roma hace un par de meses, no tenía ni idea de lo que se me venía encima. El motivo por el que estuve allí fue para celebrar el cumpleaños de un amigo sacerdote. El cual, nos invitó a mi y a unos amigos a acompañar la Eucaristía de acción de gracias por su aniversario.

Entonces, al término de la misa, se puso en contacto conmigo el párroco de la iglesia en la que estuvimos. Quería que fuera a Roma en otra ocasión para poder celebrar un concierto de órgano.

Para mi, oportunidades de este calibre no las tengo todos los días. Por ello, desde mi conocimiento autodidacta, me puse manos a la obra enseguida.

La iglesia de la que hablamos es la Parrocchia “Santa Maria Regina” de Valle Martela, en Zagarolo (Roma). La colocación de la primera piedra tuvo lugar el 16 de abril de 2017 y fue inaugurada el 15 de diciembre de 2019 por el obispo de Tívoli y Palestrina, S.E. Monseñor Mauro Parmeggiani. La iglesia es el punto de referencia de aquel territorio. (Para ver más información).

Es un contexto de edificios bajos, villas y casas unifamiliares, con grandes áreas de vegetación privada interpuestas, la creación del complejo parroquial de Santa Maria Regina della Valle representa no sólo la posibilidad de crear una referencia paisajística, sino también la oportunidad de reurbanizar una porción del territorio, posicionándose como una centralidad urbana para el desarrollo de la comunidad.

Todo el edificio está revestido con yeso blanco, colocado únicamente en contraste con el color antracita de los elementos: este acabado acentúa su presencia dentro de un paisaje urbano cuyos edificios carecen de carácter fuerte.

En cuanto al tema musical, la parroquia cuenta con un órgano de tubos de 2016. Su rango abarca desde un Do2 hasta un Fa6 en el teclado y desde un Do2 a un Re4 en el pedalero. El pedalero está aplicado al teclado. En cuanto a la registración, cuenta únicamente con principales de 8’, 4’ y 2’ pies.

Debido a esto, tuve que buscar un órgano con pedalero para poder preparar de forma adecuada este concierto. Gracias a varias amistades, encontramos sitio en una parroquia de Sevilla donde pude llevar a cabo los ensayos de las piezas que estaban programadas.

El motivo del concierto era la festividad de Todos los Santos. Decidí que las piezas adecuadas eran las que hablaran sobre la muerte y la resurrección.

Al finalizar el concierto, con el público puesto en pie, recibí de manos del Oratorio Kairos de la parroquia un cuadro de la virgen titular del templo. Con el aplauso general, terminó el concierto con el agradecimiento mío y por parte del párroco. Posteriormente, pasamos al comedor para una cena con todos los asistentes y organizadores del concierto.

Durante los cinco días de mi estancia en Roma, además, visité algunas basílicas importantes de la ciudad y la Universidad Pontificia Lateranense. Espero poder dentro de poco a tan bella ciudad.

¡Arrivederci!